ONETA - CASCADAS DE LA FIRBIA Y ULLOA Y APROXIMACIÓN FALLIDA A LA DE MASEIRUA
DISTANCIA 5 KM (SI SOLO SE VISITAN LAS DOS PRIMERAS 3,5 KM IDA Y VUELTA)
En el centro del pueblo, en la misma carretera que lo cruza y junto a la iglesia, tomamos un ancho camino que discurre entre las casas y que se encuentra perfectamente indicado con un letrero
El camino abandona el pueblo y entra en una zona de praderías y fincas dejando el cementerio a la derecha y con el río a la izquierda
Casi al final de las fincas nos encontramos una bifurcación, hemos de tomar el camino de la izquierda que comienza a descender hacia los restos de una edificación que pertenecía al Molino de Casa Regueiro.
Aquí el río se estrecha y discurre por un promontorio rocoso formando remolinos y pozos, incrementados por el abundante caudal que lleva el río.
Por debajo de este mismo punto del molino de casa Regueiro se encuentra el pozo de la Hoya, marmita gigante situada en el arranque de la primera caída de agua denominada La Firbia, donde fue instalada, en 1949, una turbina que producía electricidad
Abandonamos el río, dejandolo a nuestra izquierda, pasando por una pradería con una cabaña totalmente cubierta de hiedra.
Al poco, el camino girará a la izquierda y descenderá hasta la base de la cascada, entre robles, castaños y abedules. Cuando llegamos a las orillas del río Oneta, el espectaculo que tenemos ante nuestros ojos es grandioso.
Cascada la Firbia |
Estamos a los pies del primero y el mayor de los tres saltos del río Oneta. Se trata de la cascada de la Firbia con una altura superior a los 20 metros de altura, originada por la erosión de rocas de diferente grado de resistencia (cuarcitas muy duras y resistentes frente pizarras blandas y deleznables). El agua cae en un pozo en el que se acumulan los grandes bloques de piedra desprendidos de la pared rocosa
Las paredes rezumantes del roquedo aparecen cubiertas de gran número de musgos, helechos y entorno a ellas, se desarrolla una rica cubierta arbórea de fresnos, robles, alisos, sauces y saúcos.
Seguimos descendiendo junto al río y a los pocos metros nos encontramos con el Molín de Abaxo perfectamente conservado y en su interior podemos ver el mecanismo de la molienda y la maquilla , en perfecto estado.
Se trata este de un molino de rodezno y cubo , este tipo de molino de transmisión directa , eliminaba los complicados órganos de transmisión de los ingenios de rueda vertical , reduciendo así su mantenimiento , ahorro de energía y aprovechamiento del agua.
Seguimos el canal que existe en la margen derecha del río, y que se utilizaba para hacer llegar el agua al cubo del Molino Real situado unos cientos de metros más abajo hacia el que descendemos
Su interior tambien se encuentra en perfecto estado de conservación.
Desde el mismo molino arranca un pequeño sendero descendente que nos vuelve a depositar en la orilla del río Oneta unos metros por debajo del segundo de los saltos, y arrimados a la pared por una zona muy resbaladiza y en la que es facil meter el pie en el agua nos dirigimos a la base de la cascada
Ante nosotros la Cascada de la Firbia de más Abaxu o de Ulloa, de menos altura que la Firbia y menos vertical, pero no por ello menos hermosa.
Existe una tercera cascada aguas abajo, se trata de la cascada de Maseirua, hacia ella intentamos llegar. Para ello nos subimos a las praderías situadas en esta margen derecha del río para luego descender nuevamente a sus orillas. Seguimos paralelos al río por una especie de canal construido para un antiguo molino del que no queda ningún resto, luego atravesamos un bosque de pinos y llegamos a un punto en el que este margen derecha se vuelve vertical e infranqueable, la opción para seguir bajando sería la de cruzar a la otra orilla, sin embargo el caudal que lleva el río requería tener que descalzarse y cruzar las frias aguas, y además viendo que la otra orilla estaba muy tomada por enormes cotollas, decidimos desisitir en el intento. (Luego en el chigre de Oneta nos dijo la dueña que la bajada está casi imposible por la espesa maleza y que quizá sea mas facil alcanzar la cascada desde el pueblo de Folguerosa en la carretera de Navia a Villayón).
Así que volvemos nuevamente sobre nuestros pasos en dirección hacia Oneta. Antes de llegar, un fuerte aguacero nos hace resguardarnos en la cabaña cubierta de hiedra que se encuentra antes de la primera de las cascadas.
Llegando a Oneta vemos la cumbres del Panondres que es el pico en cuya cima se encuentra situada una antena y nos decidimos subir hasta el.
Entrando nuevamente en Oneta
Oneta con muestras de arquitectura popular como estos horreos con pegollos y techumbre de pizarra.
En Oneta tambien podemos ver la iglesia de Santa María de Oneta
En el Inventario Parroquial del siglo XV, ya figura la feligresía de Santa María de Oneta. De este momento data la Corona de la Virgen de Oneta (1599). Es de plata cincelada a golpe de martillo y se encuentra en el depósito del Episcopado, pendiente de ser calificada para su traslado al museo episcopal. Su diámetro es muy pequeño, lo que nos hace pensar que la antigua imagen de la Virgen debía de ser una talla de pequeñas dimensiones. La imagen actual es probablemente del siglo XVIII. Otra de las joyas de esta Iglesia, el Cáliz (1601), de plata dorada, sólo se utiliza el día de la fiesta, el resto del año esta custodiado en otro lugar, por razones de seguridad. En él figura la siguiente inscripción: “Este cáliz es de Nuestra Señora de Oneta, del conceyo de Navia, feito en Asturias, en Oviedo y consagrado en la ciudad de Évora, por el Arzobispo Teotonio de Braganza. Lo ofreció Rodrigo de Lago y Sierra en 1601”.
La iglesia actual fue terminada en el año 1898.
La subida más sencilla al pico Panondres se realiza subiendo por la carretera AS-36 que desde Oneta nos alza al alto del Sagredal desde donde nos restaría un corto ascenso hasta la cumbre. Sin embargo nosotros queríamos realizar la ascensión desde Oneta y en lugar de subir por la carretera hacerlo por los caminos que nos señalan los mapas que llevamos. Así que dejamos la carretera para cruzar el arroyo de Brañuas a su margen derecha (en sentido de la marcha), en la otra vertiente vemos el caserío de Zarcón y por encima tapado por las nubes la cumbre de Pico Pedrouga.
Tomamos un camín maderero que se adentra en un eucaliptal pero pronto vemos como las cotollas lo invadén, no obstante seguimos subiendo por el.
Salimos del eucaliptal mientras que el camino cada vez se difumina mas.
A duras penas nos alzamos a la cabaña de la Selluca muy próxima a la carretera AS-36.
Tomamos la carreta AS-36 ya por encima del pueblo de Brañuas en busca de algún sendero que nos alce a la cumbrera de la sierra sin tener que llegar por carretera al Alto de Sagredal. Mientras la nieve empieza a caer con insistencia.
Entre que la nevada cada vez es más fuerte, que estamos calados hasta los huesos y que no encontramos ningun paso hacia la cumbrera a no ser siguiendo la tediosa carretera, tomamos la decisión de abandonar la ascensión al Panondres y dar la vuelta hacia Oneta.
Esta vez el descenso lo haremos entero por la carretera AS-36 pasando primero por el pueblo de Brañuas (550 m.) enclavado en la falda oriental del monte Pedrouga, coge de éste sus aguas el arroyo del mismo nombre. Brañuas se sitúa casi en el límite con Valdés; a su oriente se halla la sierra de Panondres que sirve de límite natural con el citado concejo.
Desde Brañuas solo nos resta descender los escasos 2 kilométros de carretera que hay hasta Oneta de la que tenemos una buena vista según bajamos.
Hey Jonatan, preciosa actividad. Las cascadas son espectaculares, desde luego.
ResponderEliminarUn saludo y feliz año nuevo.
Guapas esas dos cascadas. Aún no las conozco. Lo de la tercera ya había leido que estaba complicado de llegar a ella. A ver si en primavera me decido a arrimar por la zona. Buena nevada la que os cayó subiendo a la zona del Can. Ganas de monte teneis, ja, ja.
ResponderEliminarUn saludo
Que me voy para allá es de seguro...segurisimo....que hermosura de zona...ains Asturias de mi alma....no me importaría ser por unos momentos-decisivos jajajaja, una xana de esas cascadas.
ResponderEliminarque bonito y ver nevar así....que gozada, por León este año excasea, nosotros la estamos esperando ansiosos... para hacer raquetas y na de ná.
abrazotedecisivo
La última vez que estuve en Oneta había diluviado el día anterior así que la cascada bajaba tan grande como en vuestras fotos, que pasada, no conozco el resto del recorrido ni la subida al Panondres, lastima pero bueno ahí ta para otra vez, saludos y las fotos como siempre excepcionales.
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