PUENTE DOBRA - OLLA DE SAN VICENTE
DISTANCIA: 5 KM
DESNIVEL ACUMULADO: INAPRECIABLE
PLANO DEL RECORRIDO
Se sale al lado derecho del bar que hay justo en la desembocadura del rio Dobra en el Sella, el lugar conocido como la Mecedura del Dobra.
A escasos metros nos encontramos un bonito puente medieval (Puente Viejo) Este viejo puente de piedra se asienta sobre un par de gruesos pilares. Un pegoyo evita el paso de vehículos, a fin de proteger su conservación.
Dejamos atrás el puente y seguimos por la ancha pista paralelos al rio y rodeados de pequeñas praderías
El paseo continúa por las márgenes del Dobra.
Al entrar en un pequeño bosque, la pista gira a la derecha y comienza un corto repecho. Una portilla cierra el paso a un recogido prado
-El repecho finaliza enseguida frente a la cabaña de Xibil como así indica el letrero tallado sobre la puerta de entrada.
Más allá de Xibil se abre la vasta extensión de praderías por las que se adentra la pista. Superadas dichas praderías el camino se estrecha hasta formar una senda pegada al río y labrada en la caliza.
El río Dobra tiene un color esmeralda, semejante al del Sella y el Cares. Posiblemente por descender sus puras aguas de los altos neveros de los Picos de Europa; y contar con una vegetación lacustre, musgos y líquenes, de esta coloración
Llegamos a la altura de unos bonitos rápidos en el rió.
La senda se aleja de la orilla del rio para adentrarse en una zona de praderías que son la antesala de la majada de San Vicente
Finalmente la senda nos deposita en un paradiasiaco lugar:
donde tras bajar por un rabión del apretado cauce, las aguas del río Dobra descansan en una amplia y profunda poza rodeada de praderías donde crecen numerosos alisos, La Olla San Vicente.
DISTANCIA: 5 KM
DESNIVEL ACUMULADO: INAPRECIABLE
PLANO DEL RECORRIDO
Se sale al lado derecho del bar que hay justo en la desembocadura del rio Dobra en el Sella, el lugar conocido como la Mecedura del Dobra.
A escasos metros nos encontramos un bonito puente medieval (Puente Viejo) Este viejo puente de piedra se asienta sobre un par de gruesos pilares. Un pegoyo evita el paso de vehículos, a fin de proteger su conservación.
Dejamos atrás el puente y seguimos por la ancha pista paralelos al rio y rodeados de pequeñas praderías
El paseo continúa por las márgenes del Dobra.
Al entrar en un pequeño bosque, la pista gira a la derecha y comienza un corto repecho. Una portilla cierra el paso a un recogido prado
-El repecho finaliza enseguida frente a la cabaña de Xibil como así indica el letrero tallado sobre la puerta de entrada.
Más allá de Xibil se abre la vasta extensión de praderías por las que se adentra la pista. Superadas dichas praderías el camino se estrecha hasta formar una senda pegada al río y labrada en la caliza.
El río Dobra tiene un color esmeralda, semejante al del Sella y el Cares. Posiblemente por descender sus puras aguas de los altos neveros de los Picos de Europa; y contar con una vegetación lacustre, musgos y líquenes, de esta coloración
Llegamos a la altura de unos bonitos rápidos en el rió.
La senda se aleja de la orilla del rio para adentrarse en una zona de praderías que son la antesala de la majada de San Vicente
Finalmente la senda nos deposita en un paradiasiaco lugar:
donde tras bajar por un rabión del apretado cauce, las aguas del río Dobra descansan en una amplia y profunda poza rodeada de praderías donde crecen numerosos alisos, La Olla San Vicente.
unas fotos chulísimas, sin quitarle mérito al los lugares.
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