Peña Ten es una de las cumbres más emblemáticas y bonitas de la Cordillera Cantábrica. Este privilegiado balcón se encuentra compartido por leoneses y asturianos, concretamente por el concejo de Acevedo en León y el asturiano de Ponga. No obstante, la mayoría del recorrido lo haremos por tierras leonesas, cuyo ascenso presenta menos desnivel y dificultad que desde tierras ponguetas.
El ascenso lo haremos en circular subiendo por el valle de Valdosín y descendiendo por el de Carcedo.
Aquellos que quieran hacer un recorrido más largo y duro recomiendo completarlo con la aproximación a la vega y ermita de Arcenorio o con el ascenso a su hermana pequeña Pileñes.
DATOS DEL RECORRIDO
- Inicio y fin: La Uña (ACEVEDO - León)
- Fecha de realización de la ruta: Julio 2020
- Tiempo total: 8,30 horas (Incluidas paradas)
- Distancia total: 16 kilómetros
- Desnivel acumulado de subida: 1.000 metros.
- Desnivel acumulado de bajada: 1.000 metros
- Altura máxima: 2.142 m. (PEÑA TEN)
- Altura mínima: La Uña 1.180 m.
- Recorrido: La Uña-->Valle de Valdosín-->PEÑA TEN-->Puertos de Fonfría-->Valle de Carcedo-->La Uña
- ¿Recomendable para niños?: No ( Es recomendable un paseo por el valle de Valdosín desde el área recreativa cercana a la Uña, pudiendo llegar perfectamente hasta el Puerto de Ventaniella)
- Dificultad del recorrido: MEDIA : Por distancia y desnivel.
- Track del recorrido:
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VIDEO DEL RECORRIDO EN GOOGLE EARTH
Dejamos el vehículo en el pueblo leonés de La Uña y ascendemos unos 900 metros por la carretera N-625 dirección Puerto Tarna hasta que en una curva tomamos esta pista que sale a nuestra derecha. hay un paso canadiense y un cartel de la ruta hasta Ventaniella.
Este camino de Ventaniella se trata de la Vía Vadiniense, este nombre se debe a una antigua tribu cántabra que habitaba la zona de los Picos de Europa (zona de las montañas de Riaño, y valle de Valdeón. Su capital, Vadinia, es de localización incierta, pero algunos expertos la llegan a situar entre los pueblos de La Uña y Acevedo donde se han encontrado restos de edificaciones de aquella época.
Estos Vadinienses fueron sojuzgados por el emperador Augusto en el siglo I, fueron los romanos los que construyeron esta calzada que comunicaba esta zona con los valles cantábricos ya también sometidos.
La creación de pistas ganaderas en ambas vertientes han acabado con los restos de esta antigua vía, tan solo en la mayá del Xierru y Ventaniella en la zona asturiana queda algún pequeño tramo.
Nos adentramos en el valle del arroyo Valdosín (otras fuentes lo consideran como Río Esla cuyo nacimiento lo colocan en la Vega Valdosín ) flanqueado por una llamativa peña: La Peña Castiello.
Prospecciones arqueológicas llevadas en esta Peña Castiello, han dado resultado la existencia de restos de una torre medieval (de ahí su topónimo). Para su descubridor esta torre tenía como función el control fiscal y la vigilancia de este importante camino de Ventaniella.
Espectacular ramillete de orquídeas.
El valle se encajona, corriendo el río más abajo entre cascadas y hermosas pozas,
Tras traspasar otra portilla metálica alcanzaremos la amplia vega de Valdosín
que culmina en el Puerto de Ventaniella paso fronterizo hacia Asturias y hacia donde se dirige esta importante antigua vía.
Nosotros sin embargo al poco de pasar la foz (1.290 m.)abandonamos el camino de Ventaniella para dirigirnos a nuestra derecha paralelos al arroyo Las Corvas en busca de la base de nuestro majestuoso objetivo de hoy: La Peña Ten.
Encontramos un pequeño refugio ganadero
Abandonamos el valle las Corvas para subirnos a un collado situado en la base de la arista de Peña Ten. Ojo que hay una zona de piornos que pueden complicarnos el paso.
A Nuestras espaldas el hayedo de Valdosín y al fondo la espectacular silueta del Mampodre.
Alcanzamos el collado (1.400 m.) y podemos ver el punto donde vamos a iniciar la larga ascensión hasta la Peña Ten. Comenzaremos por la zona denominada Las Pedrices de Peña Ten (nos queda nada más y nada menos que unos 750 metros de desnivel).
Hemos de traspasar esa cresta rocosa y ascender por una amplia vallina que encontraremos al otro lado
Punto por donde flanquearemos este crestón, existen jitos que nos marcan el paso.
A punto de superar la cresta, atrás los verdes pastos de Valdosín.
Al traspasar la cresta se abre ante nosotros la Canal de las Pedrices una gran vallina por la que hemos de subir un gran tramo. Hay que tomarlo con paciencia.
Cuando la vallina está llegando a su fin hemos de girar ligeramente hacia nuestra izquierda y acometer la subida por una pindia ladera en busca de la cumbre. No hay jitos pero se puede subir por cualquier lado.
Este es sin duda el tramo más duro de la ascensión.
A una altitud aproximada de 2.000 metros alcanzamos la cresta final que nos alzará hasta la cumbre. Hasta aquí la subida ha sido bastante monótona, aquí empieza lo más entretenido.
Espectacular lo que nos queda hasta alcanzar la cima de Peña Ten
La cresta es muy ancha y su vertiente norte tendida así que se sube sin ningún problema.
Alcanzando la cumbre de Peña Ten (2.142 m.) con vértice geodésico.
Pocas montañas tienes unas vistas tan inigualables como Peña Ten.
Vistas hacia Picos de Europa
Hacia el norte su hermana pequeña Peña Pileñes separada de Ten por la Collada Arriondas.
Tras la larga parada en esta preciosa cumbre seguimos nuestra marcha. Para el recorrido de vuelta optamos por seguir la cresta de Ten dirección E-NE
La recorreremos aproximadamente un kilómetro adentrándonos para ello en territorio asturiano.
La niebla empieza a engullir la vertiente norte de la cresta dejando estas vistas espectaculares.
Alcanzamos una pequeña cumbre en la cresta (2.080 m.) desde aquí observamos la cumbre de Ten
Seguimos el cómodo descenso por la cresta con la niebla envolviéndonos
A nuestra derecha La Vegadona y Puertos de Fonfría donde hemos de descender.
Esta zona oriental de la cresta de Peña Ten nos brinda vistas únicas sobre el Cornión.
En el punto en el que la cresta empieza a iniciar un acusado descenso la abandonaremos para dejarnos caer hacia la Vegadona por donde vemos mejor paso, no encontramos ningún jito pero el descenso aunque muy pindio no entraña ningún problema salvo tener cuidado con el lanzamiento de piedras.
Alcanzamos un pedrero por el que descendemos con cuidado.
Ya por terreno pedregoso seguimos el largo descenso con las verdes praderías de la Vegadona y Fonfría como objetivo marcado.
Dejamos la Vegadona (la parte más baja de las amplias praderías) a nuestra izquierda. Mientras avanzamos dejamos a nuestra espalda el espectacular circo rocoso que forma esta cara sur de Peña Ten.
Ante nosotros los preciosos pastos de Fonfría (1.650 m.) muy frecuentados por el ganado.
Hacia el oeste delimitados Por el Collado las Corvas
Un autentico placer recorrer estos puertos.
En su extremo oriental arranca una pista que desciende por los contrafuertes norteños de Peña Mora
Para adentrarse en este valle de Carcedo que nos llevará hasta la Uña
Pequeño establo donde antes se asentaba la Majada de la Fonfría (1.410 m.). Aquí existia un chozo para los pastores de las merinas que todos los años regresaban con sus ovejas. Su techumbre vegetal con forma cónica y muy puntiaguda y que normalmente tenían que arreglar todos los años.
A pesar de ser ya julio estas montañas están en plena primavera.
Adentrándonos en el valle de Carcedo por esta cómoda pista ganadera.
Cruzamos al margen izquierdo donde nos encontramos la fresca Fuente Carcedo (1.320 m.)
Alcanzamos esta remozada cabaña del Aguzabrero
Hemos de prestar atención a este punto para no seguir por la pista que nos llevaría al pueblo de Polvoredo. Un cartel a un lado del camino nos muestra la dirección que hemos de seguir para llegar a La Uña.
El camino aunque no es tan marcado como el que llevábamos se aprecia perfectamente, en un primer tramo recorre los amplios pastos del Aguzabrero.
Ya nos queda apenas un kilómetro de descenso hasta llegar al pueblo de La Uña donde tenemos el vehículo.
Hola, buenas noches, y tras decir que he disfrutado con el relato, dos puntualizaciones.
ResponderEliminarLa primera es que el hayedo (jayal como denomina por aquí la lengua leonesa al bosque de hayas) de valdosin no es uno de los pocos en suelo leones, es más, la superficie ocupada por las hayas en León es similar a la asturiana. El mayor hayedo de la Cordillera cantábrica está de facto en León, ocupando varias miles de hectáreas entre Valdeon, Sajambre, y La Montaña de Riaño.
Y dos, la cumbre de la Ten está totalmente en León, aunque Asturias tiene una parte del macizo, a la inversa sucede con la Peña Pileñes.
Saludines.