PEÑA BUSLLAR Y CAMIN DE LA FOZ DE GOBEZANES
DISTANCIA TOTAL 6,5 KILÓMETROS
DESNIVEL ACUMULADO 650 METROS
PLANO DEL RECORRIDO
Nuestro punto de partida hoy, será el pueblo casín de Gobezanes (620 m.). Uno de los pueblos más bonitos y mejor conservados de este concejo.
Muchas de las casas de esta pequeña población, por suerte han sido restauradas manteniendo su arquitectura popular.
En la parte alta del pueblo tomamos una amplia pista, hormigonada en gran parte que asciende en dirección norte hacia la collada de Arnicio. En esta pista encontramos las marcas del GR 102 "Ruta del Sellón" que sigue el recorrido del antiguo camino romano que entraba en Asturias por el puerto de Tarna y llegaba hasta Infiesto.
Por desgracia la construcción de pistas han destruido gran parte del antiguo empedrado, cuya mejor conservación lo encontramos en las proximidades del collado del Sellón.
Este tramo que vamos a ascender está totalmente destruido por otra insufrible pista de hormigón.
Llegamos al punto que vemos en la foto donde tenemos a nuestra derecha el hermoso valle del arroyo Trespandu, poblado por verdes praderas y alguna cabaña (740 m.)
Nada más cruzar la riega de Trespandiu, cuando la pista acomete una fuerte subida para abandonar este coqueto valle, hemos de abandonarla por nuestra izquierda para tomar un camino que asciende por la derecha del valle.
En un principio el camino está perfectamente marcado, dejando a nuestra izquierda las praderas del valle de Trespandu
El camino solo sirve para dar servicio a las fincas del valle y muere en una de ellas. Por ello nos subimos a la loma que cierra el valle por la derecha y seguiremos ascendiendo por ella en dirección noroeste. En la parte alta de las praderías que cubren el valle vemos el grupo de cabañas que forman la majada de Panizales. Por encima de estas alcanzamos a ver la cumbre que ascenderemos en el día de hoy: Peña Busllar o Tejeira.
La ascensión la haremos por una clara vallina, denominada Valle L' Picu que nos dejará practicamente en la cumbre.
La ascensión no tiene pérdida ninguna ya que remontaremos la vallina por su fondo hasta su parte final muy cercanos a la cumbre de la peña Busllar.
Alcanzamos la cumbre de la Peña Busllar o Tejeira, como reza el antiguo buzón de cumbres situado en su cima (1.234 m.)
Al no encontrar en kilómetros a la redonda ninguna cumbre con altitud superior a esta de Busllar, las vistas son magníficas. Esto tenemos hacia el este
Hacia el sur-sureste vemos toda la cresta que se precipita sobre la foz de Gobezanes (por donde luego pasaremos) y también podemos observar todo el itinerario de subida que hemos realizado desde Gobezanes (en la foto puse Govezanes, en algunos mapas encontre este pueblo con "v")
Hacia el sur el embalse de Tanes. Lástima la mala visibilidad por la posición del sol.
Hacia el oeste destaca la piramidal silueta de la Xamoca y a su derecha la sierra de Peña Mayor.
Vamos a realizar el descenso en dirección oeste para buscar el amplio collado del Llanón, divisoria de aguas entre el Nalón al sur y el valle de la Marea que vierte al Piloña hacia el norte. En un primer momento vemos demasiado pindio el descenso por esta vertiente, así que avanzamos por la cresta en dirección norte buscando un punto más asequible para el descenso.
Seguimos unos metros por la cumbrera hasta que encontramos el paso que nos permite bajar hacia el collado.
Una vez situado en el collado del Llanón (1.065 m.) giramos a nuestra izquierda para descender en dirección sur hacia Priede.
Como nuestro objetivo es alcanzar el antiguo camín que de Priede se dirigía a Gobezanes atravesando la foz de Gobezanes, vimos que no era necesario llegar al pueblo de Priede sino que iríamos más directos arrimándonos a la peña Busllar buscando los senderos de ganado que hay en su falda.
No obstante si no queréis complicaros la vida podéis bajar por la pista que se toma en las cabañas que hay por debajo del Llanón y que os depositarán en Priede sin pérdida alguna (pero ya sabéis los que seguís este blog que no nos gustan las pistas y las evitamos siempre que es posible)
Llegado el punto donde seguir pegados a la peña no es demasiado cómodo, saltamos un cierre de fincas situado a nuestra derecha para entrar en una pradería de grandes dimensiones conocida como la Llosona (880 metros)
Seguimos descendiendo por las praderías sin alejarnos demasiado de los contrafuertes calizos de la Peña Busllar hasta el punto que vemos en la foto donde encontramos una portilla metálica (780 m.) que nos da acceso a un camino que viene, o nos lleva (según se mire) al pueblo de Prieres.
Este punto es inconfundible porque salimos junto a otra llana pradería con chavola donde la dueña (con la que estuvimos charlando), tiene el prado lleno de plásticos, cedes y otros objetos de colores para espantar según ella al "ferre" que le come todas las semanas alguna gallina.
Desde este punto un vistazo atrás hacia el collado Llanón y el itinerario de descenso.
En este punto hemos de arrimarnos totalmente a la peña, dejando a nuestra derecha las lindes de las fincas del pueblo de Prieres. Y ya no abandonaremos la franja de monte bajo que discurre paralela a las estribaciones calizas de la peña Busllar.
En un primer momento el sendero está un poco cerrado por la maleza, pero según vamos descendiendo, la cotoya y el bardial pierden entidad.
Nos vamos alejando de Prieres y el descenso en busca del valle del río Orle se hace mucho más pronunciado.
Unos 100 metros antes de llegar al fondo del valle encontramos con el precioso camino empedrado que unía antiguamente los pueblos de Prieres y Gobezanes.
Este fabuloso camino carretero utilizado para el paso de carros, animales y personas antes de la construcción de la carretera actual, era el único paso para salvar la corta pero vertical foz de Gobezanes y de esta forma acceder a la parte alta del valle de Orle.
Según nos comentó un vecino de Gobezanes, este camín ya en los años 50 no tenía uso para la circulación de carros o vehículos pero si lo usaban los habitantes de ambos pueblos para comunicarse entre ellos. Por suerte su traza y sus espectaculares armaduras todavía se conservan en buen estado y permiten un tránsito sencillo por el.
Uno de los puntos más espectaculares donde el sendero a golpe de barreno cruza una de los espolones calizos que descienden desde las alturas de la Peña Busllar.
Hacia abajo totalmente encajonado discurre el río Orle y el trazado de la actual carretera
El sendero en ligero descenso cruza una amplia canal donde los argayos han destrozado parte de la caja del antiguo camino.
Cruzamos otro espolón calizo ayudados por estas espectaculares armaduras.
Un vistazo atrás desde el último canto rocoso que supera el camino.
La foz de Gobezanes es corta, apenas llega al medio kilómetro. Pero el trazado de este camino a pesar de ser breve ha sido uno de los puntos fuertes del día.
Nada más doblar el canto (donde existe un poste eléctrico) el sendero entra en una zona boscosa y donde encontramos una bifurcación. La de la derecha en descenso nos lleva a la carretera, por ella podremos ascender hasta Gobezanes donde tememos el vehículo. El de la izquierda asciende por el bosque hasta alcanzar unos prados situados al oeste de Gobezanes. Solo es buscar la portilla de entrada a dichos prados y ascender por el camino que da servicio a los prados hasta alcanzar el pueblo de Gobezanes.
2 comentarios:
Pues acaba de prestame pola vida esta ruta. La mió moza ye de Nieves y siempre xubimos pela carretera que crucia la Foz de Gobezanes (ye con B, como pues ver na toponimia oficial y tradicional de Casu). Asína que nun me queda otra que conocer Peña Busllar y averame hasta'l Monte'l Cabezu onde hai un vértice que tengo pendiente jaja.
Prestóme muncho la ruta la verdá.
Un abrazu
El pueblu nunca estuvo nominau a pueblu ejemplar. Lu confundis con Coballes. Guapu, si que lo ye.
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